El Santo Carpintero.

Mañana es el Día de San José. Mañana abrirá y cerrará sus persianas un nuevo diecinueve de marzo. En mi familia según los antecedentes investigados por mi primo Vitín y que se remontan al siglo XVIII han existido muy pocos Pepes. Estamos, a que dudarlo, ante uno de los nombres más comunes y copiosos de Sevilla. Puede que con los vacuos modismos imperantes en los últimos años haya decaído considerablemente este nombre. Este santo día, entre otras muchas connotaciones sentimentales, es el auténtico pistoletazo (de flores) de salida de la primavera sevillana. Después de San José ya las cosas nunca serán lo mismo.  En pleno Centro de la Ciudad dentro de una Capillita de una belleza sublime recibe culto este Santo Carpintero. Andan buscando fondos para completar su necesaria restauración. Es mucho lo avanzado pero quedan algunos flecos para que esta joya del Barroco luzca en todo su esplendor. Esperemos que nuestras autoridades no se nos muestren una vez más insensibles y cicateras ante la necesaria conservación de nuestro rico e inigualable patrimonio. Mañana, Día del Patriarca San José, aparte de que comercialmente se instituyó como el Día del Padre también debía ser el Día de los Carpinteros.  Ebanistas, tupitas, charolistas y encoladores celebrando una de las primeras carpinterías de la que históricamente se tienen noticias. “San José era carpintero / y en esa carpintería / cepilla  un niño un madero / a golpes de luna fría”. Mañana es el Día de este Santo varón. Mañana es el Día de San José.  Mañana Sevilla empieza su cuenta atrás en su calendario sentimental.  Mañana será otro Día…. de San José.